A tres años de cumplir medio siglo, la Universidad De La Salle Bajío festejó su cuarenta y siete aniversario con la celebración del Día de la Comunidad, el pasado domingo 27 de septiembre.
Egresados, alumnos, docentes, administrativos y funcionarios asistieron a la universidad acompañados de familiares y amigos para conmemorar lo que un día el Hermano Manuel de Jesús Álvarez Campos inició en el mes de septiembre de 1968, cuando la institución abrió sus puertas por primera ocasión para continuar con la obra de San Juan Bautista De La Salle.En punto de las 10:00 a.m. comenzaron las actividades programadas para el festejo, iniciando con la Celebración Eucarística realizada en la Cancha Principal del Universum Nostrum, finalizando con el mensaje inaugural del Rector de la Universidad Andrés Govela Gutiérrez.
Más tarde las Porras Estudiantiles del Campus Américas, Juan Alonso de Torres y San Francisco del Rincón, presentaron sus rutinas alternadamente durante el Juego de Futbol Rápido de Alumnos Vs. Exalumnos.
Dentro de las actividades programadas, Mi Museo Universitario De La Salle mostró la Exposición Fotográfica Óseos Cosmos, la cual pretende resaltar la existencia de la teoría en la que la ciencia, el arte y la mística están profundamente vinculadas. Además de permanecer abiertas las Salas que albergan las exposiciones temporales y permanentes, tales como Trama Cíclica, Tótems y Chamanes en la Biblioteca de la universidad.
Desde distintos puntos de la locación se desarrollaron dinámicas artísticas, lúdicas y recreativas para toda la comunidad, todas ellas fueron organizadas por las distintas Facultades y Escuelas, además de los Departamentos que integran la Dirección de Formación Integral y Bienestar Universitario.
Se desarrollaron talleres de manera simultánea, tales como; el Taller de hidroponía para siembra de lechuga, jitomate y chile; Arte en hierro, manualidades con bolsas de papel y foamy. Juegos como la lotería intercultural, el maratón Tlamatini, la tómbola de valores y el rally educativo. También los alumnos de odontología realizaron actividades enfocadas al cuidado bucal. Y el taller de elaboración de Pan Artesanal fue impartido por los estudiantes de Gastronomía.
fotografía: Milton Ponce
Así mismo, se llevó a cabo en los edificios de arquitectura “rapel” propuesto por el Club de excursionismo, Cuentacuentos, Concierto de la Orquesta Universitaria del Campus Américas, Danzas Polinesias y la presentación de Moebius Teatro, misma con la que se dio fin a este importante día para la Comunidad Lasallista.
Desde 1968, la Universidad De La Salle Bajío forma parte de una familia con una tradición de más de 300 años y sigue cumpliendo con su compromiso y misión de formar de manera integral a las personas con valores en la región, hoy en día este compromiso ha traspasado fronteras, pues su población actual está conformada por estudiantes provenientes de todos los estados de la República Mexicana, así como de otros países.
Un año dos días. ¿Qué es un año dos días para un padre que no sabe desde hace un año y dos días dónde están sus hijos?
¿Qué es un año dos días para un país que no sabe desde hace un año dos días dónde están sus maestros?
De dos males el menor. Mejor un grupo de maestros, organizado o no, protestando y haciendo plantones ante “n” cantidad de reformas educativas, que un grupo de maestros rurales organizados boteando para cubrir los gastos de su escuela normal.
México es un país que puede y debe prescindir de sus estudiantes. Así lo han demostrado durante años. Los cada vez menos recursos destinados a las grandes universidades públicas son una primera señal, pero no la más alarmante.
Más allá, más lejos, México, su estado, o mejor dicho, su gobierno, mata a sus estudiantes.
Antes podía ser mediático: una masacre en plena ciudad de México, a escasos días de las Olimpiadas tenía que ser noticia. Por suerte para el gobierno, sus soldados “periodistas” minimizaron la emboscada. Para ellos el 3 de octubre fue un día soleado.
Ahora, 46 años después, es más difícil, pero sigue siendo posible. Basta fabricar cualquier cantidad de noticias de paja para desviar lo más posible las miradas hacia lo irreal o lo absurdo. La “realidad real” está fuera de foco.
Un año un día se ha cumplido desde que 43 estudiantes normalistas desaparecieron: a manos del ejército, a manos de la policía, a manos del narco, cualquier hipótesis es válida. Los han querido encontrar en las numerosas fosas clandestinas y a cada osamenta anónima le han querido poner cualquiera de los nombres: Emiliano Alen Gaspar de la Cruz, Dorian González Parral, Jorge Antonio Tizapa Legideño, y decenas de nombres más, decenas de otros rostros perdidos desde hace cientos de días.
Los cadáveres: Alexander Mora Venancio y Jhosivani Guerrero de la Cruz son dos de los 43 desaparecidos cuyos cadáveres, se afirma, ya fueron identificados. El segundo de ellos, hace apenas unos días. ¿Cómo? ¿Por qué estaba ahí, muerto?
Hasta la fecha se sigue hablando de desaparición. La falsa verdad histórica del gobierno no sólo fue derrumbada sino que ahora es pisoteada. Los padres de los normalistas no van a permitir el carpetazo, en México como en cualquier lugar del mundo, el crimen desde el poder debe ya y para siempre parar. ¿Acaso es posible?
43 normalistas de Ayotzinapa, en Guerrero, fueron atacados a balazos por ser normalistas, por ser de Ayotzinapa, por ser de Guerrero, por ser de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos, por ser estudiantes.
Un año un día después, aún no se sabe de ellos. De dos se confirmó su muerte, Alexander y Jhosivani son ubicuos desde entonces, los demás, Felipe Arnulfo Rosas, Israel Jacinto Lugardo, José Ángel Campos Cantor, Jorge Luis González Parral, ellos, los demás, sus compañeros, los estudiantes, ¿Dónde están?.
Decenas de personas se reunieron en el Arco de la Calzada de León la tarde del sábado 26 de septiembre, día en que se cumplió un año de la desaparición forzada de los estudiantes normalistas de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa en Guerrero.
La movilización local fue convocada por varios grupos, entre ellos Amnistía Internacional, Colectivo 2 de enero, Ciudadanos hartos, entre otros, y el punto de reunión fue el Arco de la Calzada, de donde partió una marcha que tras recorrer la calle Progreso y un tramo del bulevar Adolfo López Mateos, tomó la calle Hidalgo para adentrarse a la Zona Peatonal rumbo a la Plaza Principal, fuera de Presidencia, en donde se hizo el pase de lista de los 43 estudiantes desaparecidos.
Los manifestantes, colectivos o individuales, portaban fotografías en blanco y negro de los estudiantes, cartulinas, mantas, con diversas consignas, megáfono e incluso tambores acompasando el recorrido.
Desde el inicio de la marcha, se hizo el llamado a una manifestación pacífica, libre de provocaciones y reacciones negativas; se resaltó la existencia de indignación, dolor e incluso hasta impotencia por la situación tan crítica y carente de justicia, pero se hizo énfasis en la importancia de realizar la movilización y la manifestación de manera pacífica e incluso artística.
De esta manera, León, con sus activistas, se sumó a la jornada internacional de movilizaciones para exigir, como desde hace un año, el esclarecimiento y la justicia en un tema en que ha habido muchas explicaciones pero pocas respuestas. El 26 de septiembre de 2014, 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos” desaparecieron en una situación que hasta la fecha no ha sido aclarada ni por el gobierno, ni por la policía, ni por el ejército ni por las autoridades forenses.
Tras derrumbar la “Verdad histórica” que la PGR ofreció meses después del suceso, las dudas crecen y las respuestas disminuyen.
Los padres de los normalistas han protagonizado la lucha y la búsqueda de sus hijos desde entonces.
León ha tenido participaciones importantes en las jornadas nacionales e internacionales de movilización y este sábado, como desde hace un año, ha sido parte de la búsqueda.
CINE COLECTIVO GUANAJUATO A.C. invita a todo el que deseé formar parte del séptimo arte en la quinta edición del Lab//KinoRoom//2015 para crear cortometrajes en las calles de León.
El laboratorio internacional de creación cinematográfica Lab//KinoRoom//2015 quiere reunir a realizadores independientes, actores, estudiantes, fotógrafos, músicos y a todos los interesados a participar en el Lab//KinoRoom//2015, el cual se realizará del 12 al 19 de diciembre del 2015 en la ciudad de León, Guanajuato. Para poder participar necesitas estar consciente de estas restricciones y aclaraciones, descritas a continuación:
•Las solicitudes son individuales. •Se seleccionarán los proyectos de acuerdo a la viabilidad de producción. •Cupo limitado. •La solicitud no asegura tu participación, la confirmación es vía telefónica y/o correo electrónico. •Cualquier situación no prevista en la presente convocatoria queda a consideración de la organización. •Los participantes deberán entrar a la página para poder llenar el formulario que se les solicita.
El último día para poder inscribirse será el día 2 de octubre y los resultados de la convocatoria, serán exhibidos, un mes después, el 2 de noviembre.
El laboratorio, constará de dos partes, los primeros días se llevarán a cabo talleres profesionales como actuación, foto, estilo de dirección, entre otros. Después se comenzarán a rodar los cortometrajes.
Durante el evento, Colectivo Guanajuato proveerá todo el equipo profesional necesario, además de que se decidirá cuántos, dónde y con quién se trabajarán los cortometrajes.
Para llenar tu formato de solicitud: http://cinecolectivo.org/lab-kinoroom-2015.html
Para más información y descargar la convocatoria completa: http://cinecolectivo.org/convocatoria-kinolab-2015/file.html
No sólo el cine de Hollywood puede ser un éxito en México y esto se prueba gracias a la buena aceptación por parte del público, en este caso leonés, del 19° Tour de Cine Francés. El Tour de Cine Francés es un evento que se ha llevado a cabo desde el 2005 donde se presentan, sólo en Cinépolis, siete filmes franceses alrededor de la República Mexicana y estarán dos semanas en cada ciudad. También beneficia a nuestros jóvenes cineastas mexicanos, pues tienen la oportunidad de presentar sus cortometrajes. Antes de comenzar con la película se puede disfrutar del trabajo mexicano que, sin duda, tiene mucho talento. Son sólo 18 proyectos de cortometraje los afortunados de tener la oportunidad de que sus trabajos sean presentados y conocidos a nivel nacional.
El 20 y 21 del presente mes presentó “Un hombre ideal “(Un homme idéal). Se trata de un joven trabajador que su sueño es que una editorial publique una de las novelas escritas por él, pero todos los trabajos son rechazados. Hasta que un día se encuentra un diario de un soldado de guerra ya fallecido y lo publica bajo su nombre. Se convierte en un autor reconocido, pero alguien sabe la verdad sobre su fraude y esto lo lleva a seguir mintiendo, robar e incluso a asesinar para terminar dando un dramático e inesperado fin a todo sus desafortunados eventos. Es un muy buen largometraje de drama y suspenso, donde en su primera función tuvo la sala a un 80 por ciento de asistentes.
La protección de este cine francés, la podemos encontrar en el Cinépolis ubicado en Centro Max sobre el Blvd López Mateos. Aunque no sólo se exhibirán en la ciudad, también será en ciudades como Acapulco, Celaya, Colima, Puerto Vallarta, y estrenarán en ciudades como Aguascalientes, Hermosillo, Mérida, entre otras. Es un muy buen pretexto para disfrutar en familia conociendo otro tipo de cine, porque el cine de Hollywood ya todos lo conocemos. El cine francés no es algo que todos los días se vea, así que hay que aprovechar y al mismo tiempo apoyamos y conocemos el trabajo de los jóvenes estudiantes de cine de nuestro país. Para checar la cartelera completa: http://www.tourdecinefrances.com/resultados-circuito-cinepolis-mexico/?ciudad=51&complejo=0&pelicula=0&fecha=0&wpv_filter_submit=Ver+Cartelera&wpv_post_id=2886
Cientos de personas alzaron su voz en un grito común; ¡Viva México!
Lo normal: el tráfico de coches y de gente, la acumulación de personas en calles, avenidas; la acumulación de ruidos, palabras, sonidos de todo tipo e imágenes de todo tipo: bigotes, banderas, trenzas, vestidos.
El olor, en la calle y en el viento de la calle, la comida, mexicana o no, estaba servida no sólo en las casas sino en las calles, en las mesas compartidas por desconocidos entre desconocidos.
La tradición no es sólo celebrar un grito, el llamado Grito de independencia. Si en sus inicios lo fue, ha pasado para algunos a segundo término y se convierte en motivo (pretexto) de convivio, mexicano o no.
El día 15 en León ocurrió como suele ocurrir: dentro de lo normal, el grito se dio y todo lo demás sucedió.
Pasadas las diez de la noche la gente seguía entrando a la Plaza de los mártires, Plaza principal, o en general a la Zona Peatonal, no sin antes ser escaneados por un sistema de seguridad modesto.
En los accesos principales a la Zona se instalaron vallas para controlar el ingreso; casi todos debían pasar por el escáner que con cada persona hace un ruido, si levantabas sospechas, una fila de policías te esperaba del otro lado y cualquiera era libre de revisarte.
Dentro, del otro lado, estaba la fiesta y la vendimia, el ir y venir, entrar y salir, cantar o callar, o simplemente estar, en lo cotidiano, en un lugar que se pintaba de colores.
Los bares seguían exhalando su música y no precisamente música ranchera o tradicional mexicana: desde lo alto de uno de los bares se escuchaba a través de sus balcones algo de Héroes del silencio. Todos dentro hacían ruido, y todos afuera, desde arriba, presenciaban todo.
Un nudo de gente se aglomeró justo en el paso de la Plaza de los Mártires a la Plaza Fundadores, justo afuera de la Parroquia, entre un McDonalds y esa Parroquia, tan antigua, tan pequeña.
La gente estaba expectante, mirando de frente, cientos mirando todos hacia un mismo sitio.
El alcalde de esta ciudad ya se va, y sólo salió a su balcón presidencial a dar el grito una vez.
Villasana es un personaje parcial, quizá menor, pero un personaje. Su importancia no es menor por el tiempo que ha estado al frente del gobierno de la ciudad, pero tampoco se engrandeció por haberlo estado.
Su voz sonó un poco débil. No es un tipo mediático ni que gusta de los reflectores; no es un alcalde sensacional, y su deber era ser un alcalde patriótico en el día de la patria.
Salió y dio el esperado grito. Lo de siempre es escuchar lo de siempre y lo mismo: viva México y todos los héroes habidos y por haber en algo muy parecido a un santoral.
La respuesta de la gente es la misma también: viva, viva, viva a todo, como respuesta, como examen, de memoria.
Es probable que algunos lo sientan, es probable que otros sólo lo memoricen.
Poco antes de las once de la noche, cientos de personas en la plaza principal de León hicieron repicar su voz como, dicen, Hidalgo hizo repicar la campana llamando a misa.
Cientos de personas alzaron su voz en un grito común, acaso a veces vacío, como dicen, Hidalgo alzo un estandarte, enarbolando una imagen que no le pertenecía del todo en su papel de criollo.
Y más, las voces que luego fueron una, estallaron en júbilo de identidad cuando el alcalde desde lo alto clamó un “Viva León” que encendió los ánimos y el amor a la matria. Viva León, muchos vivas, muchos significados.
Inmediatamente después estallaron también los fuegos en el cielo: la pirotecnia no fue abundante pero sí iluminó varias veces y por minutos el oscuro cielo que de noche y no tanto de lluvia, cubrió la Plaza como antes la cubrieron las balas y la sangre.
Sobre la Plaza nuevamente se extendía el rojo, precisamente un rojo sangre nacido de otras circunstancias pero en igualdad de escenarios: la sangre derramada por personas en lucha, que como esa noche de 2015, como aquella tarde-noche de 1946, como aquellos años de 1810, esos años de 1910 y los que falten, han muerto legando un vestigio de sangre que inclina la bandera siempre, y siempre más de su lado rojo sacrificio, en el que se celebra a la patria cada año, como si nada pasara nunca.
El grupo ¿Quieres unabrazo? nació en junio de 2013 por la
necesidad que los colaboradores tuvieron de compartir lo que tenían con los demás. La convocatoria se dio por
medio del grupo de Facebook “60 MINUTOS POR MÉXICO”, en la cual se invitaba a
la gente a ayudar y a compartir alimentos con las personas que se encuentran en hospitales por algún familiar enfermo y que no tienen la disponibilidad en
tiempo o económicamente para comer.
A esta convocatoria
respondieron varias personas, la mayoría
con experiencias personales con enfermos, se reunimos y quedaron en ir los
miércoles a las 8:00 p.m. a la clínica núm. 48, de Gineco-pediatría del SeguroSocial.
De ahí, descubrieron que el alimento no lo era todo, es por eso que con el tiempo buscaron un poco más de identidad, y le dieron al grupo su primer y único nombre: ¿QUIERES UN ABRAZO?, pues nos dimos cuenta que la gente aparte de tener
hambre tiene necesidad de consuelo y cariño.
Esta labor se ha llevado a cabo durante dos años, pero desafortunadamente en la actualidad, por pequeñas diferencias de los integrantes, se tuvo la necesidad de separar el grupo en dos partes. Una parte continúa yendo al mismo lugar de siempre y la otra parte va los miércoles al mismo horario pero al Hospital Pediatrico De León, Guanajuato.
Y aún cuando el grupo se encuentra dividido, siguen sido testigos de historias felices y tristes, de gente
agradecida y hermosa. Actualmente, está conformado por: Alejandra, Flavio, Alicia,
Angélica, Jorge, Eric, Alexandra y donadores anónimos que semana con semana nos apoyan
con efectivo y en especie. Mientras podamos seguiremos yendo a compartir cariño
y alimento, nuestro pago son los abrazos y bendiciones.
Mi Museo de la Universidad De La Salle Bajío sede de exposición “Óseos Cosmos, las formas del tiempo”.
Bajo las creencias de la imposibilidad de vincular la ciencia, el arte y la mística, los científicos paleoantropólogos Alejandro Pérez-Ochoa y Thimoty Bromage, demostraron mediante fotografías científicas, la teoría de que estos tres elementos están profundamente conectados.
Titulada “Óseos Cosmos, las formas del tiempo”, es una muestra de 40 fotografías expuestas en Mi Museo de la Universidad De La Salle Bajío, donde los científicos lograron presentar que no hay fronteras entre lo científico, lo artístico y la espiritualidad, pues a partir de estas imágenes, puede apelarse a la inspiración y la introspección, el entendimiento y reconocimiento de uno mismo y de los demás.
Con la ayuda de un microscopio especializado, el cual permite estudiar los fósiles sin maltratarlos, ni destruirlos, se logró obtener estas imágenes que muestran el interior de las estructuras óseas, así como su composición estética, las cuales comentó el científico
Alejandro, “provocan en el espectador una serie de cuestionamientos que te llevan a reflexionar acerca de ¿quiénes somos? ¿de dónde venimos? y ¿hacia dónde vamos?”.
Así mismo, Pérez-Ochoa, afirmó estar contento de estar en la ciudad de León, así como de mostrar su trabajo en la Universidad De La Salle Bajío, la cual se convirtió en sede de su exposición, misma que ya se había exhibido con anterioridad, en el Museo de Nueva York.Por otro lado, resaltó que sus imágenes tienen el valor agregado de poder apreciarse a través de la tercera dimensión.
”Mirar las fotografías de Óseos Cosmos, nos obliga a un doble esfuerzo, el esfuerzo de ver, pero también el de adivinar”. Mencionó el doctor.
El montaje permite conocer parte de la evolución del hombre, a Lucy, por ejemplo, que es considerada como símbolo de todos los tiempos prehistóricos, así mismo, distintos seres vivos, de los cuales solamente queda el tejido duro, sin embargo, este residuo es el único elemento que posee la capacidad de registrar la historia y entorno del individuo al que perteneció.
“Óseos Cosmos, las formas del tiempo”, estará abierta al público hasta el 4 de enero de 2016, la entrada es gratuita.
Vainilla Chocolate abre su séptima sucursal en León, Gto.
Es una cafetería que inicia con un concepto de repostería saludable, Gourmet y de gran sabor, La idea nace en Morelia, Michoacán.
Actualmente cuentan con algunas franquicias alrededor del país; Michoacán, Jalisco, Querétaro, Puebla, Baja California, el Estado de México, y por fin han decidido que León es una de las ciudades ideales para una nueva sucursal.
Vainilla Chocolate es diferente a las demás, debido a su valor agregado, el cual es cuidar de la salud del mexicano, ya que como sabemos nuestro país se encuentra entre los primeros números en la lista de obesidad y diabetes, así que esta cafetería nos ofrece dos tipos de alternativas, la línea bienestar y la línea regular.
La primera se trata de recetas originales de Vainilla Chocolate con un delicioso sabor, y la línea bienestar cuenta con postres igualmente originales y deliciosos pero con un toque único y característico, ya que son sin azúcar, ni grasas trans y como resultado tenemos ricos postres con un bajo índice glucémico, lo que genera una posible necesidad que se podría cubrir en todo ese mercado que no habían sido contemplados en venta de la deliciosa repostería, aunque no necesariamente esta línea de productos es para aquellos que tienen algún padecimiento de estos, también es para quienes disfrutan de comer manteniendo la línea.
Además de todos los beneficios que puede ofrecernos, tiene una gran variedad de productos, pastelitos, brownie, galletas, tartas, cupcakes, pan de mesa, pasteles, entre otros. Cuenta con una cafetería para que desayunes en el establecimiento y así mismo con un servicio a domicilio para que disfrutes estos deliciosos postres desde la comodidad de tu hogar.
La sucursal de la ciudad está por abrir sus puertas en las próximas semanas, para ser más específicos a finales de este mes o principios de octubre.
Ahora sólo queda esperar a que pasen los días para poder deleitarnos con el tradicional sabor de Vainilla Chocolate.
El desarrollo
industrial y cultural del Municipio de León ha ido a la alza en los últimos
cuarenta años, posicionándose como una de las ciudades más importantes del
país, así mismo, la ciudad curtidora, ha dado un enorme salto en el área
deportiva, ya que cuenta con el maratón más antiguo de México.
El próximo 20 de
septiembre de este año, se celebrará la edición número 36 del MaratónLeónIndependencia,
el cual se promociona este año con el eslogan de
“Correr es libertad”.
Mediante un
comunicado del sitio web oficial del Maratón León, la directora general de la
COMUDE, Lourdes Rangel, informó que “este evento que es considerado estelar en
la ciudad de León, pretende alcanzar la meta de por lo menos 3 mil 500
corredores en las 9 diferentes categorías.
De los ganadores
absolutos del maratón, tanto en rama varonil como femenil, el primer lugar
obtendrá 50 mil pesos, el segundo lugar 25 mil pesos y el tercer lugar se
llevará 18 mil pesos.
Durante los últimos diez años, los africanos han reinado esta prueba,
siendo Hillary Kimaiyo, el keniata que posee el tiempo récord de 2:11:47 en la
sección varonil y su compatriota Viola Vor Chepleting con un tiempo récord de
2:37:21 en la femenil.
Se
asignará un premio adicional de $20,000.00 pesos al primer corredor y a la
primera corredora que supere las marcas del Maratón León establecidas en los
años 2007 y 2008 respectivamente, por los corredores extranjeros ya
mencionados.
Así mismo,Se asignará un premio adicional de $10,000.00 pesos al
primer corredor y a la primer corredoraGuanajuatense,
en cruzar la meta, siempre y cuando llegue en los tres primeros lugares.
El
premio al mejor leonés en la edición 2014, fue para Daniel Vargas, con su
triunfo en la distancia de 21 kilómetros.
La salida y meta será en la Unidad Deportiva Enrique
Fernández Martínez, teniendo como recorrido, las principales vialidades de la Ciudad de León, Guanajuato. La
justa atlética comenzará a las 7:00 de la mañana en sus
tres distancias: Maratón (42.195 Km);
Medio Maratón (21.0975 Km) y 10 Kilómetros.
La identidad que conservan los residentes que vieron nacer al Mercado República.
El recuerdo
del mejor mercado, acaso el único mercado. En el lejano año de 1926, una
inundación arrasó con las casas que ocupaban el espacio donde actualmente se
encuentra el Mercado República.
Ocho años
después, con el paso del tiempo y de ciertas decisiones, una colonia con sus
costumbres, espacios, dinámicas e historia, se convirtió en un barrio.
Hacia el año
34 llegó el nuevo mercado, que ahora es tradicional y parte de la historia.
El Barrio de
Santiago busca todavía su identidad. En los años 60, con los inicios del trazo
del bulevar López Mateos, no sólo la modernidad llegó a León, sino una división
particular que determinaba quiénes estaban del lado del río y quiénes cruzaban
ese bulevar, casi una carretera, para llegar al otro lado, al Barrio de SanJuan de Dios, o al lejano mercado de La Soledad.
José
Trinidad, Don Trino, llegó de Jalisco
en el año 31 del siglo pasado. Nació en el 26. Vivió su historia al mismo
tiempo que la historia del mercado; aquella lejana inundación está en su
memoria como recuerdo familiar. Lo que sus ojos atestiguaron fue la edificación
del Mercado República, su mercado, su fuente de vida.
Recuerda la
inundación, la edificación y el incendio, ese que por poco y termina con la
vida de un mercado que comenzaba a ser de la gente, en torno al cual se
comenzaban a tejer relaciones, modos de vida y un trozo de historia.
Don Trino hace
poesía pero él prefiere llamarles pensamientos.
Le agradece a Dios la posibilidad de concebirlos y dictarlos para que sus hijos
los escriban.
Su vida ha
transcurrido de inicio a fin en las calles que circundan el Mercado República, su patrimonio es fruto de su trabajo de décadas como carnicero y locatario
del mismo.
Él, como sus
compañeros de colonia y trabajo, recuerdan con alegría y algo de nostalgia los
años en que floreció sin igual la vida social y económica de un mercado que no
sólo daba vida sino sentido: la llegada de los visitantes “lejanos” que “bajaban
del cerro” a conocer; la competencia, también lejana con el gran mercado de La
Soledad… y todo aquello que puso en riesgo "eso" que les daba un motivo en
el día a día.
Doña Angélica
también lo recuerda, de noche, mientras limpia los insumos con que prepara la
comida que vende aún en el interior del mercado, confiesa:
“Mira, antes era
más bonito, ¿por qué? Porque antes, estaba el Cine Isabel.
Antes había allí
luchas; no había todavía calles cortadas como están ahorita; eran calles,
calles, calles. Aquí, donde estaba el cine, atravesabas y estaba un sitio, una
farmacia…”
Y mueve la
mano en el espacio como dibujando una ola, recordando quizá más cosas que sólo
las calles.
El Cine
Isabel fue un punto importante, más que un sitio, por su relevancia artística.
A su lado, la Arena Isabel fue pisada por El Santo. En la misma calle, la
Artes, alguna vez entrenó el equipo León, y así entre historia e historia los
recuerdos se multiplican.
La sensación
de identidad como Barrio, en Santiago, es fuerte. A pesar de que es pequeño, su
fuerza de identidad es inversamente proporcional: poco importa que a penas a
algunas cuadras un río lo parta, y que del otro lado, un gran bulevar lo separe
definitivamente con la concurrida Zona Centro; tampoco importa que más allá del
río, San Francisco y San Juan tengan además de su propio mercado y su iglesia,
su propio jardín.
Al Barrio de
Santiago le sobran historias y anécdotas, recuerdos y cronistas aún vivos, que
esperan en los umbrales de sus negocios o de sus casas antiguas, ser
escuchados.
Don Luis es
otro de ellos.
Atiende un
puesto de uniformes. Afuera, como si fuera una broma, dice “Uniformes.”
“La gente se
confunde, dice riendo, a veces no leen bien y piensan que dice ‘Informes’,
entonces llegan y me preguntan cosas”.
Él se
aventaba, al estilo clavadista desde el Puente Barón o sobre lo que ahora es la
parte alta del Malecón del Río, hacia el Río de los Gómez. Tiene fotos de cómo
lucía lo que él y algunos otros llaman “El bordo”, antes de ser embovedado.
En el río se
podía nadar; era incluso la diversión por excelencia, además del fútbol, de
quienes vivieron y crecieron en Santiago.
El Mercado,
afirma, fue durante mucho tiempo el mejor de todo León.
“…y poco a
poco con el transcurso de los años, empezó a hacerse de muchos borrachos,
rateros, asaltantes, vende-drogas. En la actualidad es un mercado que de
aquellas quinientas personas que podían venir a comprar, si vienen cien gentes
al día es mucho, porque tienen miedo de que los asalten, todos los flojos,
huevones, mantenidos, que asisten adentro del mercado…”, recuerda.
Como muestra
de que su decepción no es en vano, describe cómo en su juventud tuvo el valor
de enfrentar el fuego que amenazaba con echar abajo lo que ya era motivo de
orgullo para todos sus vecinos.
Al momento
del incendio, afirma le tocó “apagar el fuego que se metía a la casa de mi tía;
los techos eran de madera. Abrimos llaves de agua y un amigo mío me ayudó a
apagar, para que el fuego no entrara hacia adentro de la sala, del pasillo, de
un negocio que tenían ahí en la calle; el fuego duró toda la noche eran como
cuatro, cinco de la mañana cuando lo terminaron...”
Eso es apropiarse de un sitio y dejarse apropiar por el mismo, arriesgando la vida sin
miedo, y así es vivir la decepción, de ver caer de otra forma lo que le dio
sentido a la vida, cuando todo era distinto, cuando todo era mejor.
Trino,
Angélica, Luis, aún sienten, viven, huelen y caminan a su modo las calles que
los vieron crecer, el mercado que les dio de comer.
Para ellos,
todo antes era mejor. Para todos, el mercado es y ha sido el único; ya se dijo,
sin importar qué otra cosa influya, sí, la vida era mejor, está en los recuerdos
y en las historias que se cuentan.
Para ellos,
aquellos años, “todo tiempo pasado fue mejor.” Para todos.
Nuestra ciudad cuenta con la armonía musical de los leoneses.
La música que
acompaña el viaje de quienes visitan el centro de León, es parte de las
fotografías y el color. De día o de noche, esos músicos, intérpretes, desafían
el silencio que quedaría si quienes caminan no hablaran.
Son la música
de fondo de una ciudad que crece y se mueve, a veces en silencio, a veces en
compases.
El multi-instrumentista
Lo reconocen
porque toca tres instrumentos a la vez (a veces más): la guitarra, una zampoña
y percute un bombo con su pie derecho; además, marca el ritmo con un pequeño
pandero afianzado a su pie izquierdo.
Es EdgarAlvarado, tiene 26 años y cuenta entre 4 y 5 los años que lleva tocando en el
centro, motivado por “las ganas de querer tocar, de hacer lo que te gusta”.
Dijo que ante
la falta de foros y espacios para tocar, no se desmotivó, optando por
presentarse en el centro, “un lugar apropiado, como el corazón de León”.
Integra su
repertorio con música andina, bajo la idea de compartirle a la gente un sonido
agradable para todos, que independientemente de los gustos, pueda atraer a
cualquiera.
Para lograrlo,
hace sonar sus cuatro accesorios musicales, en un proceso de aprendizaje que
dijo, no fue complicado ni de golpe, sino poco a poco y de un instrumento a la
vez. Considera la posibilidad de aumentar sus instrumentos: “pienso hacer más
cosas o traerme más cosas que pueda estar tocando mientras”, el proceso de
aprendizaje como músico “es algo que todavía no termina”, aseguró.
Destacó el
hecho de compartir ese tipo de expresiones con quienes lo ven por primera vez
así como con quienes ya lo reconocen pues “se necesita mucho de la motivación
de la gente”, además, enfatizó la importancia de manifestaciones artísticas que
contrasten con visiones negativas de las cosas, y que al mismo tiempo
pueda contribuir a que la gente libremente escuche, conozca y comparta una forma
distinta de crear y percibir la realidad.
Una Gaita alemana en León
Enrique
González toca la Gaita alemana y comparte su música al viento, a la gente o a
quien lo escuche, en uno de los accesos
a la Plaza Principal de León.
Su propuesta
es distinta y desde lo lejos, por el sonido, se hace oír: toca una Gaita que
hizo traer desde Alemania y que complementó con unas piezas que elaboró un
amigo. Tiene 23 años y es autodidacta.
Al
preguntarle sobre su labor y la de quienes comparten espacio con él, declaró
que defiende la expresión musical de quienes exhiben su música en lugares como
el centro y la calle pues desde lo cultural es importante. Sin embargo, dijo
“muchas veces se ve mal porque piensan que todos los músicos vivimos de tocar
en la calle cuando no es así”.
Describió que la
reacción de la gente al escucharlo tocar es como de intriga al no saber con precisión de qué
instrumento se trata. Cuenta con tres gaitas, las eligió “porque es
un instrumento poco usual, me gusta mucho su sonido, la forma de tocar. Es algo
muy interesante”, concluyó.
Cilindrero de décadas
Con 35 años
como cilindrero, Héctor hace sonar su centenario instrumento bajo la sombra del
Portal Bravo. Una melodía dulce que brota de una caja, es la expresión musical que
comparte a quienes pasan, escuchan, se acercan, y le dejan a su vez una moneda.
Se trata de
un legado generacional que comenzó en los años 30 cuando su abuelo comenzó a
tocar el Cilindro. Después pasó a su padre que hizo lo propio a partir de los
años 50, siendo ahora Héctor quien mantiene viva la tradición en uno de los
varios pasajes que componen el cuadro principal de la Ciudad.
Es leonés y se
reconoce como “una pieza más” de la Zona Centro, pues el sonido único de un
instrumento como el suyo se distingue de cualquier otro, y defiende el oficio
tan antiguo del cilindrero que empezó, aclara, no en la calle, sino en las casas
como parte del acompañamiento que tenían las familias al interior de sus
hogares.
Es su medio
de vida, y de todos sus hermanos, es el único que siguió con el oficio iniciado
por su abuelo. Respecto a sus hijos, insistió en que se trata de algo
voluntario, ellos deciden si continuar la tradición, respetará lo que decidan.
Si tienes antojo pero no sabes qué comer, Creperie de la Rue puede ser la mejor opción.
Este famoso establecimiento, ubicado en Paseo del moral #429, Col. Jardines del moral, León, Gto., nos ofrece una gran variedad de comida para escoger, siendo su especialidad las crepas con una gama amplia de combinaciones al gusto. En el menú podemos encontrar desde crepas dulces, saladas, crepipizzas e incluso Gourmet, así mismo, cortes y ensaladas, hamburguesas y baguinnis, sin olvidar las deliciosas entradas y bebidas. Además, nos ofrece desayunos a la carty bufett.
Ya son demasiadas las razones por las que sería una excelente idea visitar este lugar, que poco a poco genera más fama, no sólo por su rica comida, también cuentan con una excelente atención al cliente, un ambiente agradable, un área de juegos para niños y servicio de valet parking.
Es una muy buena oportunidad para probar algo nuevo, salir a platicar con los amigos o simplemente disfrutar de una buena comida entre familia. Para fortuna de todos los admiradores de las crepas, el restaurante abre todos los días de la semana en distintos horarios. De domingo a jueves de 8:00 a.m. a 10:30 p.m., y los viernes y sábados de 8:00 a.m. a 11:30 p.m., agregando un plus a nuestra suerte, también cuentan con servicio a domicilio, de lunes a viernes de 1:00 p.m. a 10:00 p.m.
Así que, con tus amigos, con tu novio (a), con tu familia o simplemente solo, puedes ir a visitar este innovador restaurante y puedes estar seguro de que no te arrepentirás, o si prefieres no salir de casa, puedes llamar al Tel. 7-73-23-23.
Si eres de los que le gusta leer los comentarios antes de visitar algún lugar, te dejamos también el link de una página que te puede servir de mucho.